Después de estar meses dándole vueltas al asunto una y otra vez, decidimos preparar nuestras maletas para visitar a la familia en Chile, ya habíamos tenido que posponer un viaje en el mes de Octubre, pero ahora ya finalizando el año y yo con lo sentimental que me pongo, ya no quería dejar pasar más tiempo para ver a mi familia y amigos, ya los extrañaba mucho… hace más de un año que no veía a mi mamá y hermana, además teníamos que renovar la visa jajajajajajjaja.

Así que mientras recopilamos la información para la visa empezamos a realizar el trámite de renovación del Pasaporte, ya que el mío vencía justo en las fechas que estaría allá. Debía sacar uno nuevo a través del Consulado de Chile en NY. Para mi mala suerte no tenían hora hasta FEBRERO del 2021, así que toda urgida empecé a buscar otras opciones y resulta que me dieron una hora de emergencia en el consulado de Filadelfia, así que tendría que viajar para allá para renovar mi Pasaporte y poder retirarlo en Chile para que me calzaran las fechas, si no, estaba frita.

Para ir a Filadelfia organizamos nuestro primer road trip con Rafaella, lo que no era tarea fácil, porque si algo es verdad, con guagua hay que llevar de todo. Arrendamos un auto, ya que queríamos exponernos lo menos posible y la verdad fue bastante cómodo. El viaje en sí fue bueno, hicimos un par de paradas para estirar las piernas y sacar a la Rafi del car seat, que si bien el viaje es de app casi dos horas, preferimos parar antes porque estaba un poco inquieta.

Todo iba bien, hasta que después de salir de la embajada regresamos al auto y no estaba… si leyeron bien NO ESTABA. Podrán creer que cuando Andrés me dijo que no estaba el auto, yo no le creí porque…… CÓMO NO IBA A ESTAR EL AUTO… COMO?!, pero real no estaba donde lo habíamos dejado, cuento corto, después de dos infartos, una hora de llanto, echarnos la culpa el uno al otro….incluso a la Rafi, llamar al 911, después de todo eso, encontramos un cartel que decía «NO ESTACIONAR, SOLO EMBAJADA» y justo abajo de eso había un teléfono al cual llamar para saber dónde habían remolcado tu auto.

Lo primero que pensamos fue… si es como en Chile no van a saber en que corral está, lo más probable es que no lo sepan hasta mañana, de ahí a que te entreguen el auto… pfff pueden pasar días y ni hablar de cuánto hay que pagar. Así que con toda la fe llamamos, nos respondieron en el corral que se encontraba y que podíamos retirarlo en un par de minutos después de pagar la multa. En un, dos por tres llamamos a un uber que nos dejó en el corral y ahí esperamos unos 20 minutos hasta que una vez pagada la multa te llevan a tu auto y solo después de eso pudimos reírnos jajajajajajajajajjaja porque ni te digo cómo estábamos.

Y bueno, con el pasaporte listo ya podíamos agendar la cita en la embajada, lo que nos faltaba era ver las condiciones que necesitábamos para poder viajar con Rafaella, ya que al ser americana no podía ingresar al país por el tema del COVID y sus cierre de fronteras.

Buscamos por todos los portales habidos y por haber, en todos había información diferente…. típico! Llamamos a Latam, Consulado, Ministerio de Extranjería, PDI y todos te decían algo diferente, hasta que salió un comunicado del ministerio de Salud en donde habilitaba a hijos de Chilenos para ingresar al país, por lo tanto podríamos viajar con Rafaella. Para poder ingresar al país solo pedían el pasaporte del menor y el certificado de nacimiento original en donde pudieran corroborar quiénes eran los padres. Como teníamos unas copias de éste, estábamos listos…. SIN EMBARGO, antes de que saliera esta modificación ya habíamos iniciamos el trámite de nacionalizacion de Rafi, PEEEEEEERO no contábamos que las cosas son igual que en Chile, y el día antes de nuestro vuelo nos avisaron que teníamos hora para una semana después de nuestro viaje …CUEEEEEC!, queremos creer que producto de las primarias se les pasó esto, pero la verdad es que quedamos con la sensación de que todo es medio al lote, en fin, como ya podíamos viajar con Rafi sin tener que nacionalizarla decidimos no avanzar con el proceso.

Cuando ya confirmamos que teníamos los documentos para viajar, la hora para la cita en la embajada y los pasajes, decidimos avisarles a la familia que iríamos de vacaciones por unas semanas … la alegría de contarles a la familia fue que ni les cuento… desde cuando conté que me había titulado que no estaban todos tan felices (porque costó sacar la carrera jajajajjajajajajajaja.

El despliegue y la coordinación que hubo para esos días fue digno de un trabajo de la CIA o del equipo de inteligencia del presidente, porque …. teníamos que tomar las precauciones para viajar por el tema COVID, hacernos los exámenes correspondientes para evitar la cuarentena en Chile. Había que dividir los días de manera igual para Santiago y Valparaíso, coordinar las visitas de los familiares, amigos más cercanos, realizar trámites y por supuesto visitar los lugares de comida que más extrañábamos, porque está bien, veníamos a ver a la familia, pero queríamos comer rico también. A medida que pasaban los días comenzamos a ponernos más ansiosos con el viaje… bueno asi como que todos NO… básicamente me empecé a poner ansiosa yo y para sacarme la ansiedad comencé a ordenar las cosas.

Comencé tres semanas antes a ordenar todo, ver qué cosas necesitaba, cuantas cosas podía llevar, los regalos que debíamos llevar, los pedidos que nos hicieron, ver el clima y tratar de llevar ropa adecuada para Valparaíso y Santiago, que aunque a pesar de estar cerca, el clima es opuesto. La última semana ya tenía listo lo de Rafi y yo aún tenía que terminar de elegir algunas prendas, pero ya estaba todo casi casi.

Para organizar la maleta dejé un lado para Rafi y el otro para mi, además compré bolsas ziploc tamaño Jumbo para llevar la ropa organizada, les puse marcadores para saber qué cosa correspondía cada una así era mucho más fácil de encontrar lo que necesitaba donde estuviera.

Al mismo tiempo que empezaba a ordenar la maleta, debía ver el tema de los asientos, antes de éste viaje yo no tenía idea, pero según las políticas de la aerolínea (no sé como serán en las otras) los menores de 2 años no pagan pasaje, solamente el impuesto y puedes llevarlo en tus piernas, en brazos o en caso de haber un asiento desocupado al lado tuyo puedes sentarlo ahí, pero por el rato solamente porque claramente no está habilitado para un bebé.

Para irnos más cómodos decidimos solicitar el baby bassinet ó moises, así Rafi podría ir durmiendo cómodamente en una cunita y sería más cómodo para nosotros también. Para hacerlo debíamos llamar al call center, ya que no puede solicitarse a través de la plataforma web, además el servicio es sólo en caso de que esté habilitado el avión para aquello, ya que el moisés debe ir anclado a una pared especial y no todos los aviones la tienen, también debe estar libre alguno de los 3 asientos habilitados y para finalizar el bebé debe medir menos de 70 cm y pesar menos de 10 kilos…. no es taaaaan simple la cosa, además tienes que hacerlo antes de que alguien también lo solicite.

El aeropuerto JFK queda app 1 hora 30 minutos desde nuestra casa en horario normal. Decidimos que como íbamos con más maletas que manos y con las cosas de la Rafi (por poco la gente creía que nos estábamos cambiando de casa) era mejor agendar un Uber para que nos fuéramos cómodos y tranquilos. Nos organizamos y lo pedimos dos horas antes de la hora for presentación para estar con una holgura suficiente en caso de que pasara algo. Me pongo de un humor HORRIBLE si estoy atrasada, así que con la experiencia ya sabemos que es preferible esperar en el lugar que estar cerca de mi mal humor.

El uber debía pasar por nosotros a las 16.00 así que tipo 15.30 le dije a Andrés que empezáramos a bajar las cosas y cuando ya estábamos listos esperando, saba la hora y no llegaba el uber… comprenderán que comencé a ponerme nerviosa y no entendíamos porque Uber nos había cancelado el viaje, así que ya tipo 16.30 cuando cachamos que no vendrían por nosotros, volvimos a revisar y era que nuestra tarjeta estaba mal ingresada, por eso se había cancelado el viaje, rápidamente agregamos la tarjeta CORRECTAMENTE y en un par de minutos apareció el Uber… en estos momentos es en donde yo después de volver a mi estado zen, solo sonrío y digo: VISTE! siempre es mejor salir con tiempo porque uno nunca sabe qué puede pasar.

Ya en el auto disfrutamos del viaje, la Rafi se portó un siete no lloró, íbamos bien en la hora, así que el susto y mal rato ya se había pasado. Una vez en el aeropuerto ingresamos por la fila preferencial para hacer el check in en el counter. Ya no se puede hacer por internet (modificación por COVID), una vez en el counter la señora nos pidió los documentos, el certificado de nacimiento de Rafi, lo mira y me dice, el certificado no está apostillado, el bebé no puede viajar…. WHAAAAAAT?? BROOOOOMA!

Claro que me bajó la indiada en un, dos por tres y reclamé hasta que más no pude, porque de verdad que no salía en ningún lado lo del apostillado, que por lo demás no tenia idea que significaba… básicamente es legalizar el documento para que sea válido en varios países. Fue así como tuvimos que partir a la casa, sin antes haber cambiado los pasajes, llamado a la familia para avisarles que no viajaríamos, se lo tomaron bien CASI todos, ya que mi adorada hermana había cambiado la fecha de su matrimonio por nosotros y cuando supo que no podíamos viajar se enojó un poco…. UN POCO.

Ese día era halloween y habíamos disfrazado a la Rafi de Caperucita roja se veía tan tierna… acá les dejo una foto solo para chochear jajajajajajajja.

Entre el lloriqueo, la rabia y la ansiedad me acordé que habíamos iniciado el trámite de la nacionalización, así que quizás podríamos viajar con algún documento que dijese que la Rafi estaba en tramitación del Rut o algo así. Efectivamente, nos dieron un salvoconducto para poder viajar…. ni les cuento cómo estábamos de contentos, no solo porque iríamos a ver a la familia, si no porque no perderíamos la cita con la embajada, que era básicamente la razón del viaje.

Durante esos días que esperamos por nuestro nuevo vuelo, no abrí ni las maletas, así que obligada a ocupar puro pijama todos esos días, porque mi cabeza ya estaba en modo vacaciones y no iba a lavar nada de ropa jajajajajajjajja menos ordenar.

Cuando llegó el día de nuestro vuelo iba más asustada que cuando llegaban a la casa mis papás después de la reunión de apoderados. Esta vez el Uber llego a la hora así que yo me sentía casi triunfadora porque era la primera señal que todo iba bien…. HASTA que llegamos al counter para el check in donde nos dicen que sin escudo facial no podríamos viajar, ya que el vuelo hacia escala en Lima y Perú tenía esa política…. CSM, nosotros por precaución habíamos llevado escudos faciales, pero el mío lo había dejado en el Uber y a esa hora estaba todo cerrado….DONDE IBA A ENCONTRAR UNO !!! Hasta que a Andrés se le ocurrió que podía irme con el que le habíamos comprado a la Rafi y entre perder el vuelo nuevamente o verme ridícula, a esta altura de la vida ya da lo mismo.

Así que con esa porquería de apuicultor me fui no más, ya sentados en el avión nos avisan que no se puede sacar ni la mascarilla, ni el protector facial durante TODO EL VIAJE. A esa altura ya estaba con los ahogos y quería sacarme el gorro.

Mientras se subía el resto de los pasajeros, porque OBVIO que voy a hacer uso de la entrada preferencial en todo lo que pueda, nos arreglamos en los asientos que amablemente a última hora los de LATAM nos confirmaron que teníamos el bassinet desde New York a Lima, lo bueno es que era el mayor tramo del viaje y justo en la noche, así que se agradecía.

Se nos acercaron la mayoría de los tripulantes de vuelo para ayudarnos y darnos indicaciones sobre el vuelo. Básicamente era que durante el despegue y aterrizaje el bebé debe ir en brazos, no se le puede poner cinturón, en caso de que caigan las mascarillas debes ponértela tú primero, después la de ellos y no pueden andar solos. También nos ayudaron con el armado del bassinet. Como aún estoy dando leche, me trajeron un litro de agua para hidratarme, hubiera preferido una coca zero, pero igual se agredece jajajajajajajajjajaja.

Para mayor comodidad, llevamos a la Rafi vestida con pijama, cosa que pudiese estar cómoda y abrigada sin mucha ropa, leeejos el mejor tip de una mamá que me dio porque vale la pena realmente, en la cabina llevamos también su pañalera. Subimos con el coche que depués se lo llevan para guardarlo junto con las maletas, lo bueno es que cuando aterrizas al salir te está esperando.

Debo decir que nuestra experiencia fue buenísima a excepción de que a la Rafi se le pasó el pañal y me manchó el pantalón. Ya iba preparada para semejante contingencia así que tenía pantalón de recambio y polera (en caso que me vomitara). Para ella le llevaba más de un pijama, así que tiqui taca…… además mi marido que es el MEJOR, me dijo que me cambiaba el gorro cuando llevábamos un poco mas de una hora, así que el pobre se fue todo el viaje con el gorro de la Rafi.

Lo único en contra que podría decir es que el bassinet era un poco estrecho, así que es la primera y última vez que lo usaremos. Al estar ubicado en una pared que da justo a los baños, la pobre se despertaba con cada portazo que la gente daba al entrar y salir.

TIPS

1. Si viajas con un bebé menor de dos años puedes solicitar el baby bassinet o Moises, puede que te hagan un cobro adicional por el cambio de asiento.

2. Llévale una manta para ponerlo en el bassinet como sábana, sobre todo ahora en tiempos de COVID.

3. Lleva SIEMPRE una muda para ti y el bebé en el bolso de mano.

4. La mayoría de los aviones tiene mudador, pero de todas maneras lleva uno de esos liners desechables o esos como de plástico que son fáciles de lavar.

5. Llévale juguetes pequeños al babe en el bolso de mano, también toallitas sanitizadoras para limpiarlos en caso de que se caigan.

6. Pide una botella de agua en caso de que no te la ofrezcan.

7. Lleva tu coche SOLO si es práctico y fácil de doblar. Nosotros tenemos un NUNA TRIV (acá pueden verlo) y es lo más práctico.

8. Lleva siempre tu carrier en la mochila, nunca sabes cuando puedes necesitarlo.

9. Viaja con Jockey para disimular el pelo sucio jajajajajjajajajajja

10. Para organizarte mejor, lleva todo en bolsas ziplock, créeme se nota la diferencia.

Si tuviera que darle una nota a este viaje sería un 6, no le daría el 7 porque perdimos el primer vuelo porque no tenían las cosas claras en la página (que tuvieron que actualizar), pero al fin y al cabo fue una buena experiencia, gracias a Dios no hubo mayores complicaciones y Rafi pudo dormir todo el vuelo, no tuvo problemas de oídos y no lloró, así que muy buena nuestra primera experiencia.

Ahora…. llegamos a Chile y la Rafi entró como extranjera hija de Chilenos…. GRACIAS por nada!

Esa queda como historia para otro post.

Un abrazo,

Fer.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s